Noche libre. Tras dos años de pandemia, la ceremonia del Grito será presencial, pero con aparatos de seguridad reforzados
Tras dos años de pandemia de COVID-19, las emociones saldrán a flote, pues ante la menor cantidad de contagios y decesos desde que la enfermedad llegó a México, se ha declarado que los actos de conmemoración del inicio de la lucha de Independencia: El Grito y Desfile Militar, serán presenciales, sin restricciones sanitarias, pero eso sí, con fuertes aparatos de seguridad para garantizar la integridad de las familias asistentes.
En Dolores Hidalgo, estará, como ha sido costumbre, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, recién llegado de Europa y con la preocupación de sacar el presupuesto y aspirantes consolidados para las decisiones sobre su sucesión, en un proceso electoral que comenzará en septiembre del próximo año. Lo increíble, es que a 14 de septiembre, el Gobierno del Estado, a decir de la secretaria de Gobierno, Libia Dennise García Muñoz Ledo, no haya tenido aún confirmación de la participación de la Federación en el evento, a pesar de que se les envío en tiempo y forma la invitación, lo cual habla o de la desorganización de la 4T con indefiniciones de a quién hacer lucir en la Cuna de la Independencia Nacional, pues podría ser alguna “corcholata presidencial” la enviada, o de plano es indiferencia y con ello, tirantes en las relaciones con el panismo, pues el presidente ha utilizado al estado de Guanajuato como motivo de queja contra los albiazules por su oposición al paso de la Guardia Nacional a la SEDENA y la prórroga a fin de que se continúen las fuerzas armadas en las calles hasta 2029.
La seguridad en Dolores Hidalgo será coordinada entre elementos de la Policía Preventiva al mando del alcalde Adrián Hernández Alejandri; las Fuerzas de Seguridad del Estado; SEDENA y la Guardia Nacional, sin restricciones sanitarias.
En Guanajuato Capital, la fiesta será en la Alhóndiga de Granaditas, donde el alcalde Alejandro Navarro ha dispuesto un operativo de seguridad con la participación de 300 elementos municipales, más los que aporten las FSPE, SEDENA y la Guardia Nacional. La vendimia será sin restricciones y, esta vez, no habrá Ley Seca. El alcalde con esto abre una serie de festejos que culminarán con la llegada del Año Nuevo en la Capital, pues en cosa de días también dará el arranque de la versión 50 del Festival Internacional Cervantino. Eso sí, el desfile cívico del 16 de septiembre, con escolapios, quedó suspendido para no arriesgar su salud y para evitar gastos en las familias, que no han podido adquirir uniformes. Será hasta 2023 cuando se retorne a esta tradición escolar. Lo que si habrá es el desfile militar del 28 de septiembre.
En Irapuato, la alcaldesa Lorena Alfaro tendrá un fuerte dispositivo de seguridad y a los Cadetes de Linares. A pesar de los hechos de violencia recientes, la invitación a la verbena popular persiste. Se espera todo un espectáculo de luces en la ceremonia del Grito. A diferencia de los demás municipios, acá si se cuidará la salud de los presentes, los asistentes deberán portar el cubrebocas y atender las demás medidas sanitarias para prevenir los contagios por coronavirus.
En León, la fiesta será por 4 días. Alejandra Gutiérrez ha dispuesto una serie de actividades para romper el ambiente de resguardo que duró dos años. Este jueves habrá una sorpresa musical tras la ceremonia del grito, en la Plaza Principal, y el 16 de septiembre se celebrará el mayor desfile militar en la historia de León, que recorrerá todo el boulevard Adolfo López Mateos. La vendimia la harán 500 comerciantes autorizados en vía pública, que concluirá el próximo 18 de septiembre. Los arcos de seguridad, policía local, estatal y federal, darán el esquema de cuidado a la integridad de los asistentes. No hay indicación sobre el uso obligatorio de cubrebocas, aunque se recomienda.
Como vemos, la fiesta se considera necesaria, como motivo para que la gente se divierta, pero también para la reactivación económica. En los municipios se considera que con esto se abre una etapa de las festividades que permita recuperar un tanto lo perdido en los años previos. Y claro, el componente político es básico: ser vistos.
Topografía.
Planimetría. Le movieron el tapete al PAN que perturbó sus planes electorales incluso en Guanajuato
Ante el posible éxito que obtendrá la dirigencia nacional del PRI que preside Alejandro Moreno “Alito” con su iniciativa de reforma legal a fin de que el Ejército, Fuerza Área y Armada, sigan realizando tareas policiales hasta 2029, logró disgregar fácilmente la Alianza va por México, integrada con el PAN y PRD para tener un frente “político-electoral-opositor” al gobierno de la Cuarta Transformación, que preside Andrés Manuel López Obrador, y tratar de alcanzar la alternancia en el Poder de la Federación durante la elección presidencial de 2024.
Los tricolores con "golpe de mano" contra sus aliados, diestramente le movieron el tapete al partido conservador que dirige el michoacano, Marko Cortés Mendoza, quien ante el respetable se profesaba en “caballo de hacienda” rumbo a los procesos electorales del 2023 y 2024 con abanderados del PAN al frente de la Alianza, Enrique Vargas, en el Estado de México; y otro conservador más para la presidencial; sin olvidar Jefatura de la CDMX y 8 gubernaturas incluido Guanajuato.
El soslayo de los tricolores a los albiazules y a amarillos-negros sin los estudios de prospectiva respecto de los daños a los tres partidos de oposición en particular, la jugada en el tablero político está beneficiando al Movimiento Ciudadano -MC- pues podría convertirse en recipiendario de la respuesta ciudadana ante los desaciertos del partido Morena y sus opositores; el movimiento naranja de Dante Delgado puede afianzarse.
Quizá el conflicto mayor del panismo es que se descompongan sus relaciones con los sectores sociales “tradicionales” en las entidades donde gobierna, como en el estado de Guanajuato, en donde el Partido Revolucionario Institucional (PRI), pudiera convertirse en una fuerza bisagra que determine el triunfo entre los competidores reales a la gubernatura, PAN y Morena, cuyos resultados de las encuestas están en un rango entre 5 y 10 puntos con ventaja de los conservadores ante los morenos, al momento.
Aunque en el modelaje de los resultados último, del primero de septiembre pasado, la firma “Enkoll” descubre la intención del voto para la gubernatura 2024, donde la primera minoría, Morena, aparece, por vez primera, en primera posición con 33 por ciento; le sigue de cerca el PAN con 31 por ciento. De inmediato, se puede argumentar que existe un empate técnico, sin embargo, la cuestión es que los panistas no habían sido alcanzados por ninguna fuerza política, ni siquiera lograr el empate. En 3er lugar el PRI con 6 %; PVEM, 3 %; MC, 2% y PRD, 2%.
Con este escenario a los albiazules les está creciendo la lista de los aspirantes a la gubernatura del estado, proyectos de futuro político para erigir un cerco que evite la emergencia de nuevas figuras, en la lógica de que destaparse le produce presencia y para bajarse del macho deben ofrecerles otras posiciones, debido a la gran capacidad del panismo para reproducir votos; se considera que la marca es garantía para el triunfo.
Por los hechos incluidos deseos de los albiazules –los más ganadores del país-, el proceso de selección de abanderada o abanderado de los conservadores a la gubernatura de Guanajuato, se viene complicando ante el avance del partido “rojo marrón” y el viraje de los tricolores, al grado de que al interior de la dirigencia estatal ya se habla del riesgo de posible descarrilamiento del proceso del PAN para sacar su séptimo gobernador de la entidad de forma consecutiva.
Respecto del escenario de alto riesgo por los conflictos últimos, se cree pertinente que los “liderazgos y ex gobernadores” conciban que la cascada que producirá el proceso presidencial 2024 traerá una fuerza superior que en 2018 cuando Morena, estaba fuera del poder cuando aún presentaba su rostro de “movimiento”. El próximo año tendrá nueva máscara que ofrecer a los electores.
Por ello desvelan los analistas y conocedores de cuestiones electorales, los aspirantes a la grande en Guanajuato, desde el delfín J. Jesús Oviedo Herrera hasta el senador José Erandi Bermúdez, pasando por la secretaria Libia Dennise García y las alcaldesas de León Alejandra Gutiérrez y de Irapuato Lorena Alfaro, deberían de “soltarse el pelo” con el interés de ofrecer propuesta nuevas, taciturnas con ideas apoyadas en estudios y sin voltear la cara hacia Paseo de la Presa en la capital del estado, en la búsqueda de aceptación del jefe político estatal y su círculo rojo, pues la firmeza también cuenta.
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