José Luis Camacho Acevedo
Nadie debería sorprenderse de que Alejandra del Moral se haya decidido abandonar a los que la traicionaron para sumarse a la candidatura presidencial de Claudia Sheinbaum.
La ex alcaldesa de Cuautitlán Izcalli sufrió una campaña llena de golpes bajos que le propinaban desde su partido, el PRI, hasta sus “aliados” como Enrique Vargas, un panista que se cree soñado y que ahora seguramente perderá ante el morenista Higinio Martínez toda vez que ya no tiene a la amplia base que efectivamente logró construir Alejandra del Moral.
En todos los partidos se dieron ejemplos del chapulinismo y del patrimonialismo de prerrogativas y candidaturas.
Un ejemplo que sirve para ilustrar esa falta de convicción y de profesionalismo político es la disputa por la presidencia municipal de Acapulco.
A la alcaldesa con licencia Abelina López le aparecieron de pronto ¡diez competidores a la alcaldía!
Los que se sentían con más posibilidades de competirle el triunfo fueron los aspirantes de la coalición PAN, PRI, PRD y el solitario candidato de Movimiento Ciudadano.
La revocación del registro de las candidaturas a la Alcaldía de Acapulco, de Yoshio Ávila González, postulado por Movimiento Ciudadano y Carlos Granda Castro por la coalición PRI-PRI-PAN-PRD, fue ratificada este lunes por la Sala Regional del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
En la resolución número de expediente SCM-JDC-1379/2024, se señala que en un plazo de veinticuatro horas a partir de la notificación se les debe requerir a estos partidos una nueva postulación para tal candidatura, ante lo cual se debe hacer solicitud de registro de la persona que tomará la candidatura.
Al tercer día de haber sido revocada su candidatura a la Presidencia Municipal de Acapulco, el candidato Yoshio Ávila está promoviendo a su madre Alejandra González como su supletoria por Movimiento Ciudadano, mientras que Carlos Granda pretende que Irving Granda, su hermano sea su suplente por la coalición PRI-PAN-PRD.
No cabe duda que en las presentes campañas electorales volvieron a enseñar el cobre los políticos convenencieros de siempre.
La sorpresiva decisión de estos misóginos políticos, de que sus respectivos familiares directos sean supletorios, se registrará ante el Instituto Electoral de Participación Ciudadana de Guerrero IEPC.
Eso los convierte en unos candidatos destinados a una derrota ante el rechazo ciudadano que tendrían.
Lo anterior demuestra el grado de ambición de los políticos acapulqueños Yoshio Ávila y Carlos Granda, quienes han realizado ataques misóginos y de violencia política en razón de género contra la candidata más fuerte de esta contienda como es Abelina López Rodríguez del partido MORENA.
El patrimonialismo que caracterizó al PVEM que convirtió a ese partido en un negocio de la familia González Torres, hoy reaparece en casos como los que atacan a Alejandra del Moral, como la impresentable Carolina Viggiano, o los que en Acapulco quieren dejar como candidatos a su Mami y a su carnal, Yoshio y Carlos Granda, una vez que el Instituto Electoral de Guerrero invalidó sus candidaturas por ser deficientes en todos los sentidos.
Comments