El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha revelado que sus dos primeras órdenes ejecutivas estarán dirigidas contra México, en un intento por cumplir sus promesas de campaña relacionadas con la seguridad fronteriza y el combate al crimen organizado.
Emergencia nacional en la frontera
Trump confirmó que declarará una emergencia nacional en la frontera sur para detener la migración ilegal. “Pondré fin a la práctica de ‘Capturar y liberar’ y enviaré tropas a la frontera sur para repeler la desastrosa invasión de nuestro país", declaró durante un evento en Washington D.C. Esta acción permitirá el despliegue de recursos militares y policiales para reforzar los controles fronterizos y acelerar las deportaciones.
Cárteles designados como terroristas
En un movimiento polémico, el mandatario anunció que su gobierno declarará a los cárteles del narcotráfico como organizaciones terroristas. Trump aseguró que aplicará la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, una legislación histórica que le permite utilizar fuerzas del orden federales y estatales para combatir redes criminales extranjeras. “Expulsaremos a todas las pandillas y redes criminales extranjeras que traen delitos devastadores a suelo estadounidense", afirmó.
Las medidas han generado reacciones encontradas tanto en Estados Unidos como en México. Mientras que sectores conservadores aplauden las acciones como necesarias para la seguridad nacional, expertos advierten sobre posibles repercusiones diplomáticas y económicas entre ambos países. Por su parte, el gobierno mexicano aún no ha emitido una respuesta oficial.
Por Amanda Pérez
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