Ing. Everardo Ramírez Landeros
Un sinnúmero de contradicciones han abordado en la breve historia del movimiento encabezado por el septuagésimo noveno Presidente de la República Mexicana. Y es que desde sus inicios, en el que cancelaron el aeropuerto de Texcoco, justificándose en los daños al medio ambiente, pero anunciando a bombo y tambora la construcción del tren maya que representa un ecocidio para la selva del sureste del país, o la cancelación de la cervecera en Baja California, justificada en el supuesto robo de agua a los habitantes aledaños a la fábrica, siendo que en la misma semana fuerzas federales abrían las compuertas de la presa de la boquilla en Chihuahua dejando sin agua miles de habitantes del estado, la 4T dejó en claro que la congruencia no es una virtud que quieran desarrollar.
Tal fue el caso de Yeidckol Polevnsky quien fue acusada de desviar 395 millones de pesos. A pocos días de dejar su puesto como presidenta de MORENA, salieron a la luz dos contratos uno para la empresa Inmobiliaria Moscati de Querétaro S.A de C.V, y otro para Estrada Miranda y construcción S.A de C.V por 312 millones 445 mil pesos y 82 millones 555 mil pesos respectivamente. En estos contratos se acordaban las remodelaciones a inmuebles del partido que nunca se compraron.
Éstos son algunos de los muchos ejemplos de las cínicas acciones que han creado un mal estar y un cólera en los mexicanos, quienes nos sentimos ofendidos por sus incompetencias. Así demandaron durante el pasado fin de semana a lo largo y ancho de la República los miles de manifestantes que participaron en la segunda caravana anti AMLO, misma que reunió individuos de todas las clases sociales.
Esperemos que el presidente comience a escuchar el malestar de pueblo y ponga fin a sus atrocidades políticas. Que rectifique y empiece a gobernar en pro del bienestar, la economía, la seguridad y todos los problemas que atormentan a nuestro país, dejando en un lado sus ya conocidos refranes que buscan justificar su pésimo gobierno.
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