José Luis Camacho Acevedo.
Atento como siempre al noticiero de mi amigo Joaquín López Dóriga, su recuento de este agónico 2023 fue muy importante en la medida en que la memoria se refrescó y, sin duda, este año, por todos los sucesos políticos y sociales que vivimos, fue definitivamente un año anticlimático para los mexicanos.
Desgraciadamente creció la inseguridad pública, la pobreza siguió siendo uno de los grandes rezagos sociales de México, igual la salud y el tufo de la corrupción volvió a despedir su olor tan desagradable como nocivos son sus efectos.
La economía tuvo un crecimiento magro.
Sin embargo, una ocasión en la que visité al entonces senador Fernando Gutiérrez Barrios, el sabio político mexicano me dijo al escuchar mi queja de lo mal que había sido el año que terminaba y, lo peor que se pondría el que vendría, unas palabras que guardo permanentemente en mi estado de ánimo.
Me dijo Don Fernando:
“Quienes aseguran que la política es un estado de ánimo, proyectan un espíritu limitado, poque, la verdad, es la vida la que es un estado de ánimo. Y terminó con abrazo navideño y un “nos veremos aquí el próximo año para planear qué vamos a hacer”.
Y sigo creyendo en la sentencia de Don Fernando.
Tendré que trabajar con mayor ánimo, iré a votar con una conciencia cívica nada más; trataré a mis semejantes con humildad y comprensión; le daré a mis amigos de toda la vida más afecto y más constancia en mi trato personal con ellos.
Soy afortunado porque, igual que tengo una familia unida y solidaria, también es un privilegio decir que cuento con la amistad de muchas y muchos personajes a las que profeso un genuino sentimiento de bienaventuranza.
En el próximo año habrá un proceso electoral que, por muchas razones, representará un adviento de lo que nos tocará vivir, como diría la recordada Cristina Pacheco, la construcción de un futuro que tendrá que tener un entorno ecológico más sano, un ambiente de seguridad mucho mejor que el que tenemos actualmente y una prosperidad a la altura de nuestras necesidades.
NOTA:
Esta columna descansará el periodo vacacional y regresa el lunes 8 de enero puntualmente. Deseamos, todo el equipo que la hace posible, una feliz navidad y un año 2024 lleno de triunfo y salud.
¡Un abrazo sincero para todos!
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